La mayoría de adolescentes tienen un grupo de amistad al que pertenecen y con el que se identifican, suelen ser grupos homogéneos con los mismos gustos, formas de vestir y de la misma edad. Se sienten muy unidos al grupo y el hecho de pertenecer a él, aumenta su confianza y autoestima ya que se siente aceptado y querido.
Con los amigo/as ya no solo se realizan actividades sino que además se comparten sentimientos, expectativas de futuro y preocupaciones. En ellos, el/la adolescente busca apoyo y reciprocidad.
El apoyo que brinda el grupo va a ayudar al adolescente a afrontar diversas situaciones conflictivas, como los fracasos escolares, los desamores y los conflictos con los padres/madres. También va a convertirse en una fuente importantísima de información y ayuda para resolver problemas cotidianos referidos a la escuela, la sexualidad, etc.