El pasado día 20 de febrero de 2021 se celebró el día Mundial de la Justicia Social. Desde la Sección de Psicología de la Intervención Social del Colegio Oficial de la Psicología de Madrid queremos hacer llegar nuestro posicionamiento en defensa y representación del conjunto de profesionales de la intervención social de Madrid cuyo desempeño profesional está asentado en una sólida fundamentación teórica y avalado por una amplia evidencia científica (López-Cabanas et al., 2017; Sánchez y Martínez, 2018; Tamarit, 2018; Fantova, 2019) que ha permitido mejorar la salud y el bienestar de la ciudadanía (Casas y López-Cabanas, 2010; Villar, 2018; Moya, et al., 2020).
Este documento pretende visibilizar el papel de la Psicología de la Intervención Social y denunciar los problemas que afronta en su ejercicio, todo ello en clave y contexto de justicia social.
Como Sección de Psicología de la Intervención Social del Colegio Oficial de la Psicología de Madrid, defendemos que, para una justicia social garante de la defensa de los derechos humanos, la Psicología de la Intervención Social, junto a todas y todos sus profesionales, es un ámbito profesional de referencia en los servicios sociales de base, así como en los servicios especializados. Por ello nos manifestamos en defensa de un modelo donde lo interdisciplinar es garante de metodologías y técnicas de intervención, para cuyo abordaje resulta imprescindible la cooperación.
La Psicología de la Intervención Social ya cuenta con identidad y autonomía diferenciada de otros ámbitos de la Psicología, y su filosofía tiene en la justicia social su meta más valiosa fundamentada en las siguientes premisas:
A cambio, la Psicología de la Intervención Social rechaza:
Queremos hacernos visibles en un momento en que la Psicología de la Intervención Social contribuye a hacerse cargo, junto con otras disciplinas y especialidades, de las vidas rotas por la pandemia, así como denunciar la situación de precariedad en la que se encuentra la población más vulnerable, que está siendo especialmente castigada por la pandemia, cuando debería estar en el centro de las políticas sociales.
Madrid, 25 de febrero de 2021