La colegiación te aporta una garantía sobre la titulación académica adecuada y te ofrece seguridad sobre la profesionalidad de la persona que te va a prestar un servicio psicológico que somete sus actuaciones profesionales al cumplimiento del código deontológico de su colegio profesional.
La colegiación es un requisito legal para el ejercicio de la Psicología precisamente para velar por la calidad de los servicios psicológicos, dando seguridad y protegiendo a la ciudadanía de los efectos de la mala praxis.