Hay que distinguir entre trastorno de conducta y situaciones conflictivas, el trastorno es un desajuste que se identifica en diferentes áreas en el aula, este desajuste se amplía al área académica, social, emocional, familiar. Encontrando episodios de desafío continuado a la autoridad, perder la calma continuamente, conductas agresivas a nivel físico o verbal, que el o la adolescente se moleste por cualquier contrariedad, discusiones frecuentes, nos tiene que hacer pensar que tenemos que estar atentos a los signos. Las causas pueden ser diversas alguna adicción, algún conflicto familiar o emocional. En ocasiones, va comórbido a otros trastornos como puede ser el TDAH. Se puede identificar como trastorno de conducta el Trastorno negativista desafiante, donde hay un desafío y oposición continúa hacia las normas y límites hacia la autoridad. Se ve en el aula con una sintomatología caracterizada por inquietud, falta de atención, dificultades para seguir los aprendizajes.
La intervención dependiendo del diagnóstico que presente el alumno o alumna será diferente, para ello, es muy importante una evaluación y diagnóstico adecuado por los profesionales expertos que pueden proponer en su caso el tratamiento más adecuado. Los psicólogos somos profesionales idóneos para la identificación e intervención de estas dificultades.